EDUCAR EN VALORES
La labor principal de nuestros niños a esta edad es el estudio y con él se ejercitan una serie de hábitos, propios de una serie de valores.
Los invitamos a realizar la siguiente autoevaluación, prestando mayor atención a los aspectos que como papitos se deben mejorar en casa:
FORTALEZA
-¿Nuestro hogar es un hogar de “quejas”?. En la última
semana ¿cuantas veces se ha oído “que calor/frío tengo”, “que cansado estoy”,
etc?.
- ¿Tenemos tendencia a proteger excesivamente a los
hijos? ¿Sustituimos a nuestros hijos en las tareas que deben realizar?
(Encargos en casa, arreglos, etc.)
- ¿Cuantas caminatas
al campo o de excursión, hemos realizado en el último mes?.
- Cuando nuestros hijos deciden algo y luego se “echan
atrás” sin motivo ¿les ayudo para que realicen lo que se habían propuesto, o
pienso que no tiene importancia?
- ¿Quiero ayudar a mis hijos a ser “fuertes” mientras
yo soy una persona sin ambiciones de superación y mejora personal?
- En los fines de semana, vacaciones etc.. ¿Existe un
horario de levantarse de la cama, de estudio, etc... o las cosas salen como
salen?
LABORIOSIDAD.
- ¿Que me preocupa más, las notas o que mis hijos se
esfuercen y den lo máximo de sí mismos? ¿Les animo cuando veo que luchan y no
llegan?
- ¿Tienen mis hijos un horario diario de estudio y lo
cumplen? ¿Qué lugar ocupa la televisión en casa? ¿Qué razones les doy para que
hagan suyas estas ideas y no las vean como una imposición?
- ¿Cuánto hace que no hablo con mis hijos de lo que es
un trabajo bien hecho, y de la satisfacción que produce el hacer las cosas bien
esforzándose? ¿Me intereso en que acaben bien sus trabajos escolares, con buena
presentación?
- ¿Me preocupo de que en casa haya una ambiente que
favorezca el estudio? Silencio, libros (que aprendan a cuidarlos), etc..
- ¿Me doy cuenta que los fines de semana y vacaciones
también son tiempo de laboriosidad? En este sentido ¿tienen un horario adaptado
a las circunstancias ó se hacen las cosas según van surgiendo?
MODERACIÓN
- En el caso de que demos dinero a nuestros hijos,
¿qué han hecho con él la semana pasada? ¿En que la han gastado? Ha sido en
cosas necesarias o en caprichos comprados por impulsos. ¿Con que frecuencia
realizan obras de caridad? Parte del dinero
¿la dedican para ayudar a los más necesitados?
- ¿Aprovechamos las cosas hasta el final, o las
tiramos mientras aún sirven?. ¿Hacía
falta de verdad cambiarlas?
- ¿Son nuestros hijos esclavos de las marcas y los
anuncios? ¿Y nosotros?. - ¿Intentamos conjugar el capricho (a veces es bueno
“dárselo”) con la moderación? - La nevera es un buen termómetro de cómo se vive
la moderación. Abramos la nevera y veamos qué cosas de las que hay son
necesarias y cuales son superfluas. ¿Es nuestro casa un hogar donde nunca falta
de nada, refrescos en la nevera, papas fritas, dulces, aperitivos, etc. o usamos de estos para celebrar acontecimientos
familiares?
- Muchas familias realizan las compras en
supermercados. Esto brinda la oportunidad de hacer una lista y ceñirse a ella.
¿La última compra se ajustó más o menos a la previsión o fue fruto del surtido de las estanterías?.
.
PACIENCIA
- ¿Fomento en mis hijos actividades que requieren el
ejercicio de la paciencia, por ejemplo: coleccionismo, aprender a tocar la
guitarra, etc.?
- ¿Les doy razones para “soportar” a un compañero
pesado, que se burlen de ellos en el colegio, etc.?
- ¿Qué razones les doy para que hagan bien las cosas?
¿Somos capaces de esperar resultados o los queremos de inmediato?.
- ¿Tenemos nosotros paciencia con sus limitaciones y
defectos, para que de esta manera ellos también la tengan?.
La edad en la que comienza a desarrollarse y
potenciarse el compañerismo es la edad del escolar, por ello vale la pena
preguntarse:
- ¿En casa se deja hablar a todos y se escucha con
atención aunque uno tenga muchas ganas de contar lo suyo?
¿Cuándo ha sido la última vez que hemos mantenido una
conversación familiar?
- Cuando alguien critica o habla mal de algún amigo,
vecino, conocido ¿qué hacemos, “entrar al chisme” o procurar cortar la crítica
buscando lo positivo de esa persona?
- ¿Que detalles vivimos en casa encaminados a ayudar a
los demás sin que nos los tengan que pedir?.
-En las actividades de grupo ¿ponemos el máximo empeño
como si solo de nosotros dependiera el éxito, aunque luego el mérito se lo
lleve otro, o solo nos esforzamos si vamos a “lucir” nuestras actividades?. ¿Cuándo
ha sido la última vez que esto nos ocurrió en el trabajo? ¿Que hicimos?. ¿Es
tema de conversación en las tertulias con los hijos?
FORMACIÓN DE
CRITERIO
- ¿Aprovechamos en casa las oportunidades que se
brindan habitualmente, películas, noticias, comentarios del colegio, para
aclarar ideas sobre la justicia, lo bueno y lo verdadero?
- En este aspecto, ¿Vivimos y así les transmitimos a
ellos, que no se debe juzgar a las personas, que lo que se debe juzgar como
bueno o malo, verdadero o falso son los actos?
- ¿Les vamos enseñando a saber ser críticos con lo que
oyen y leen? ¿Aprovechamos los periódicos, por ejemplo, para que formen su idea
de las noticias?
- Cuando una película nos parece inapropiada, ya sea
por violencia, sexo, etc. ¿Apagamos o qué hacemos”?
Anibal Cuevas
Diplomado en Orientación Familiar (UNAV)
Hola soy Deyanira la tía de Karen Juliana Pereira pienso que el taller de padres es muy importante porque nos hace reflexionar acerca de nuestros hijos y mejorar como padres, para mejorar nuestra sociedad.me gustaría que las escuelas de padres fueran mas frecuentes.
ResponderEliminarSoy la mama de Fabian Enrique y estoy de acuerdo con la sra Deyanira puesto que en la familia es donde empezamos a construir una mejor sociedad, como padres nos equivocamos muchas veces, pero siempre queremos lo mejor para ellos y por eso no queremos que cometan los mismos errores. la escuela de padres es muy importante porque nos ayuda a fomentar valores que en ocasiones no tenemos en cuenta. también quiero agradecerle a los profesores por que nos ayudan a orientar a nuestros hijos y no solo es conocimiento.
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